Descripción
Cómo utilizar el Shaker
- Siéntese cómodamente o en caso de estar encamado levante el reposacabezas para estar en una posición de relativa incorporación; sujete firmemente el aparato, manteniendo el tubo de respiración del Shaker (el tubo largo) en posición horizontal; es importante la horizontalidad del Shaker para conseguir la vibración respiratoria.
- Respire lenta y profundamente.
- Adapte la boquilla a su boca, sellando bien con sus labios la boquilla del Shaker, para que cuando espire todo el aire de la espiración se realice a través del Shaker.
- Coja todo el aire que pueda (inspiración máxima), procure mantener todo el aire en los pulmones durante 2 o 3 segundos y a continuación exhale todo el aire por la boca con calma, despacio. Es importante ir espirando despacio, ya que ello va a dar lugar a los cambios de presión que se traduce en el estímulo vibratorio a nivel de vías respiratorias.
- A continuación Inhale y exhale varias veces, suavemente, por la nariz.
- Repita los 2 pasos anteriores 4 y 5 (coger todo el aire y exhalarlo a través del Shaker, y después unas inspiraciones y espiraciones suaves a través de la nariz).
- Tras completar el ciclo completo unas 5 veces (puntos 4, 5 y 6), expulse la flema que se ha liberado durante el ejercicio, tosa suavemente e intente volver a expectorar.
- Vuelva a completar un nuevo ciclo de 5 repeticiones y nuevamente intente liberar la flema con toses suaves.
Este trabajo respiratorio puede realizarse 2 o 3 veces al día, e incluso según va aprendiendo la técnica y viendo la respuesta que va teniendo podría aumentarse a 3 series de 5 repeticiones en cada sesión.
Pruebe también a realizar el ejercicio variando:
- La inclinación del dispositivo para encontrar el que produce la mayor vibración en la caja torácica.
- La intensidad del flujo de aire exhalado, también para encontrar el que produce mayor vibración en la caja torácica.
Más información sobre los Ejercitadores Respiratorios Mucolíticos y sus efectos.
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