Aunque las intervenciones de cadera (nos estamos refiriendo a la cirugía protésica de cadera) ofrecen generalmente buenos resultados y son operaciones seguras, su éxito depende de la experiencia y buen hacer del cirujano ortopédico y también en gran medida del descanso, de una adecuada rehabilitación y de la adopción de mínimas medidas funcionales así como del uso de productos específicos de apoyo en la fase post operatoria, tal y como vemos a continuación.
Una vez que el paciente ha abandonado el hospital, es importante seguir en casa las pautas y recomendaciones que el equipo médico nos ha fijado. Pero en todo momento debemos ser conscientes de la envergadura de la cirugía y de que el proceso de rehabilitación-recuperación va a ser largo. Es importante tener siempre presente que, aun siguiendo fielmente estas indicaciones, no es hasta pasado el año desde la fecha de la intervención quirúrgica cuando se recupera totalmente, tanto la movilidad como la fuerza muscular.
Estando ya, como decíamos en nuestro hogar, es recomendable llevar a cabo ciertas modificaciones del entorno (incluso algunas de estas modificaciones pueden realizarse con antelación a la cirugía) para hacer seguras nuestras labores cotidianas. Nuestro principal objetivo será evitar accidentes domésticos (caídas, golpes, tropezones…), que dadas nuestras limitaciones de movilidad, fuerza, equilibrio,… ligadas a la cirugía y al encamamiento pueden ser más frecuentes en esta fase.
Desde esta premisa, lo primero a lo que prestaremos atención será a la retirada de alfombras y mobiliario peligrosamente ubicado, así como a tener una buena luminosidad en las zonas de paso y estancias. Los espacios deben ser diáfanos, de forma que no existan limitaciones al uso de un andador o de muletas que van a ser imprescindibles al comienzo del periodo de recuperación.
Además de lo anterior, es importante tener en cuenta aspectos particulares como los siguientes:
En la cama:
Evitaremos dormir de lado y lo haremos preferiblemente hacia arriba colocando una almohada entre las piernas. No obstante, si en algún momento necesitamos cambiar de posición, jamás lo haremos boca abajo o sobre la cadera operada, sino que podremos acomodarnos sobre el lado bueno manteniendo la almohada entre las piernas que antes citábamos. Tampoco es recomendable elevar la pierna afectada sin flexionar la rodilla.
Al sentarnos:
Nos sentaremos preferiblemente sobre cojines que elevando el apoyo nos permitan tener la cadera por encima de la línea de las rodillas o una alternativa a los cojines es sentarse en asientos más elevados de lo habitual. Tendremos que alternar la posición de la pierna en extensión y en flexión. Evitaremos movimientos bruscos y rotaciones de cadera, por lo que en ningún caso cruzaremos una pierna sobre la otra. Mantendremos los pies con la planta completa apoyada sobre el suelo sin adoptar posiciones que pudiesen forzar la cadera (rotaciones internas o externas del pie).
En el coche:
Al igual que en casa, nos sentaremos sobre superficies que garanticen que las rodillas quedan por debajo de la posición de las cadera (cojines) y evitaremos flexiones excesivas de la misma.
En el baño:
Dado que estadísticamente el baño es la estancia doméstica con mayor índice de accidentes, no está de más seguir varias recomendaciones generales.
Debemos tener cuidado con los suelos mojados para evitar deslizamientos que desemboquen en caídas serias. No está de más colocar alfombrillas antideslizantes tanto fuera como dentro de la ducha o bañera.
Desde nuestro punto de vista de una persona intervenida de cadera, la recomendación sería ducharse sentado, acción con la cual aumentaremos la seguridad de un acto tan cotidiano. Para ello utilizaremos asientos giratorios específicos que se sitúan sobre la bañera, o bien taburetes o sillas de ducha en el caso de disponer de una ducha amplia y con buen acceso. Así mismo, hay que evitar agacharse o hacer movimientos que nos hagan perder el equilibrio. En el caso de las bañeras, jamás debemos sentarnos en el fondo, puesto que nos será excesivamente difícil volver a levantarnos.
Utilice elevadores de inodoro para, como en las anteriores ocasiones con los cojines o asientos elevados, evitar que la posición de la cadera se sitúe por debajo de la línea de las rodillas. En función de las necesidades personales, podremos optar por distintas alturas (5, 10 o 15 cm), materiales (plástico o espuma) y modelos (con o sin tapa, con o sin reposabrazos…) para definir el más adecuado en cada caso concreto.
Productos de Apoyo para operados de cadera en Ortopedia Plantia
En ORTOPEDIA PLANTIA puedes encontrar multitud de Productos de Apoyo que pueden hacer más llevadero el postoperatorio y facilitar el proceso de recuperación.
Asientos Elevadores de WC
Existen diferentes modelos de asientos elevadores de WC, en función del tipo de material, la existencia de tapa,… El ASIENTO ELEVADOR WC BLANDO, hecho de espuma resistente y protegido por una película impermeable, es muy confortable y recomendable para personas operadas de cadera ya que el material del elevador se adapta parcialmente a la anatomía del usuario, minimizando las contusiones, rozaduras,…. El hecho de que sea una superficie blanda nos va a dar confort y nos va a permitir su uso desde los primeros días después de la operación de cadera, donde aún sentimos las típicas molestias y el dolor de ésta intervención.
Se adapta a la mayoría de inodoros ya que por debajo tiene la forma de la loza del inodoro de manera que solo con colocarlo se queda fijado al asiento del WC. No necesita ser anclado, lo que lo hace más cómodo para ponerlo y quitarlo para su limpieza y para que el resto de las personas que utilizan el WC puedan retirarlo sin dificultad. Eleva a la persona 11 cms respecto al asiento habitual del inodoro.
Puede limpiarse con agua y jabón o desinfectarse con productos exentos de cloro. Puede esterilizarse en autoclave durante 5 minutos a 90º C, por lo que es un producto de apoyo generalmente utilizado en clínicas y hospitales, especialmente en el área de traumatología.
Otros productos de apoyo que pueden necesitar son :
Un calzador de mango largo para ponerse los zapatos sin tener que agacharse ni hacer una fuerza excesiva con los músculos de la cadera y de la pierna para meter el pie dentro del zapato.
El uso de medias de compresión (enteras) puede ser muy recomendable, ya que la combinación de inactividad así como la recuperación de la propia cirugía favorece el enlentecimiento de la circulación sanguínea y con ello la probabilidad de edemas en las extremidades inferiores principalmente.
A la hora de dormir de lado sobre la cadera no operada, el uso de una Almohada de Piernas resulta esencial para un adecuado descanso y evita la adducción de cadera y su rotación interna.
Todos estos productos y más puedes encontrarlos en Ortopedia Plantia, donde estaremos encantados de atenderte.